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No me encontraba al 100% recueperado de mi gran e inutil viaje desde muy lejano, pues habia caminado y vagado por el ancho del mapa por mas de 3 años. Definitibamente estaba un poco cansado de siempre ver un habitad comun, sin imperfecciones, donde la destructiva mano del hombre aun no llegaba, pero eso no era lo mio, yo preferia un lugar donde poder luchar y entrenarme mas a fondo. No me sentia a gusto...Pero sin darme cuenta lentamente veia que mi alrrededor con el trascurso de mi viaje iba cambiando, sin darme cuanta estaba llegando al reino del que tanto habia eschucahdo hablar, del que tantos mitos haian sobre el, y pude saber que estaba en el, puesto que su apariencia era incomparable, tal y como lo decian terceros, con sus grandes muros bien gastados con el tiempo y algunos casi cubiertos de musgo, muchas personas por todos lados y muy apuradas por alguna razon la cual aun era desconosida para mi, y sin dejar de mensionar "Ese" olor tan original que provenia de esta gran metropolis. Seguramente me encontraba en un lugar de bajo status social...

Vaya, vaya...Hasta que porfin llegue a esta gran ciudad, creo que me dare algunas vueltas a ver si encuentro alguna posada...Me dije mientras me arreglaba el cabello sacandolo de mi rostro y moviendolo hacia el lado.

Me dispuse a caminar mas adentrandome mas y mas en esta ciudad de nombre aun desconosido para mi, tambien esperaba no tener algun enfrentamiento ahora que recien llegaba a este lugar. No queria ganarme el respeto de la gente como el chico malo. Pero si fuera necesario no pensaria mas de 2 segundos en sacar mi gran espada de mi espalda y atacar despiadadamente.

(off: Permiso~)

-Jujuju, miren nada más, uno nuevo- *Susurro para si mismo aquel joven de cabellos castaños mientras se encontraba sobre la rama de un árbol.

Noir era un chico muy curioso y travieso por lo que siempre se la pasaba brincando de país en país divirtiéndose con las personas que lo habitaban, tanto así que llegaba a conocerlos y dejarte conocer. Aquel día se decidió solo a dormir, a recuperar fuerzas para seguir con sus juegos, pero un aroma totalmente nuevo lo despertó de su profundo sueño, ese muchacho rubio que pasaba junto a su árbol le llamo mucho la atención, y no solo por la espada que cargaba detrás si no por su aspecto, no parecía de esos lago* -¿Acaso sera de otro país?- *Se pregunto en susurros descendiendo ligeramente del gran árbol y siguiendo al otro.

Antes de dirigirse en palabras decidió examinar su aspecto, su forma de caminar, sus movimientos, todo era necesario, después dibujando una sonrisa en su rostro se dirigió al otro tocándole el hombro para llamar su atención, pero claro que no seria tan torpe como para quedarse parado, no sabia como podría reaccionar por lo que dio un par de pasos hacia atrás* -Buen día joven- *Le dijo con un tono de voz amable pero remarcando en él una edad aproximada a la adolescencia. Su postura era derecha pero con los brazos cruzados y sin quitarle la mirada de encima*

Sin poder adentrarme mas en esta gran plaza llena de cesped, me detuve puesto que alguien habia decidido tocarme el hombro, tal y como lo haria una persona normal gire dandome la media vuelta y ver de quien se trataba, no era mas que un muchacho un tanto mas joven que yo, mediamos casi lo mismo a simple vista y no represenaba una amenaza asi que solo respindi con un tono no muy amigable, simplemente como yo hablaba
Buen dia...No acostumbraba a hablar mucho pero ahora si nesecitaba hacerlo, nesecitaba una posada pronto
Mmm, creo que alfin llegue a un lugar acogedor, las cuidades grandes me encantan, ¿Sabes donde puedo conseguir un cuarto?¿Quizas una posada?...Sencillamente mis comentarios me delataban, el no hablar a diario con alguien mas me estaba afectando por que de lo anterior dicho era toda una mentira, preferia estar solo.

Casi sin ningun gesto en mi rostro espere una respuesta del chico, esperando casi desmallandome del cansancio por haber caminado tanto sin pensar en las consecuencias.

*Su reacción fue normal, pero al menos le permitió mirarle a la cara, parecía tener una expresión bastante peculiar, muy serio para su gusto.
Escucho atento a sus palabras sin dejar de mirarle mostrando aquella sonrisa en su rostro, ¿una posada? ¿De donde venia aquel muchacho? parecía cansado, no paresia, se veía exhausto.

Noir no puedo evitar el dejar salir una risilla y mientras desviaba su mirada por un momento a un lado donde unos habitante pasaban le dijo: -¿Acaso no se debe de presentar uno antes de comenzar con las preguntas?- *Enseguida le miro de reojo con sus ojos celestes, era sorprendente como los humanos se comportaban, tan distintos uno de otro.

Ladeo su cabeza negando mientras que soltaba una leve risilla, así, le extendió su mano diestra e ignorando por un momento la pregunta, decidio presentarse* -Perdón, pero yo soy Noir un gusto amigo y la posada esta un poco retirada de aquí pero es muy facil llegar- *Siguio con la mano levantada esperando respuesta por parte del otro* -Eres nuevo por aquí ¿Qué te atrajo hasta este país?- *Ciertamente le daba curiosidad saber porque preferia estos países a los otros dos, claro que los otros eran un caos para ellos pero de seguro seria algo bueno*